lunes, 15 de junio de 2020

Paso a paso


La casa luce hoy abandonada pero alguna vez tuvo su propia huerta y probablemente niños jugando en la vereda en una rayuela pintada para eso. A pocos metros, puede leerse esta frase. 


Visto en La Paternal
 
Uno tiene costumbre de encontrarse con frases pintadas en paredes. Pero eso, en estos barrios, es delicado. Por bella, por importante que sea una frase, no cualquier pared puede/debe ser pintada. Quienes hacen profesión de escribir y pintar muros lo saben. De ahí… que la idea de pintar la mismísima calle resulte inspiradora…  Se podría pensar, conversar, consensuar incluso con vecinos alguna intervención poética… en las veredas o, más discreto, quizás más fácil…. en el cordón de la vereda… Se podría imaginar un verso escrito a lo largo del cordón… Por ejemplo: “toma este mundo, es tuyo. Te lo entrego. El oficio de hombre es bello y duro. La calle es ancha y larga. Su frontera, el recuerdo y el olvido. Sus horizontes, algo que vendrá….” Y así. Desarmar el poema, volverlo a armar... volverlo horizontal... Seguir y seguir hasta donde dice que este asunto es algo “digno de ser vivido y defendido y superado y transformado y andado…”.