domingo, 18 de marzo de 2018

El gesto de Luis


Suelo renegar cuando me sorprendo diciendo –o escucho a otros decir– que Fulanito o Menganita es tal o cual cosa. Como si las personas fueran una sola cosa y no esto y lo otro, un caos, un sinfín de contradicciones, además de otras expresiones que les dedica mi amigo Pascal…  Pero sucede, a veces, que algún rasgo, de pronto, sobresale. Un tono. Y si hubiera un pintor cerca, ese rasgo, ese tono podría dar lugar a un cuadro. Estamos escasos de pintores pero no de fotógrafos. Por suerte. Es así como el gesto de Luis fue registrado. Hace unos meses, con algunos amigos comentamos el tema del Mural de Argomedo en Valparaíso. En pocas palabras, se trata de un mural del año 70, que fue tapado en dictadura, y que resurgió. Desde entonces, ha sido defendido por algunas –pocas– personas. Hace un tiempo, el mural, maltratado de diversas maneras, fue nuevamente “agredido”, invadido, por una figura oscura que apareció literalmente de la noche a la mañana. En la foto se aprecia esa figura oscura y también, en rojo, la figura de Luis que intenta sacarle la silla, voltear al agresor. Declaro que me siento totalmente agradecida por el gesto de Luis y miembro de una estirpe de gente sumamente extraña y “sospechosa”, diría mi tío Enrique. Irreductiblemente sospechosa. Gente de transitar los mundos y de traernos, a cuento de nada, la mejor sonrisa en medio de tanta desolación que no hay forma de evitar. 

Mural de Argomedo - Valparaiso - 2018


Cándida