“Leeré libros muy largos, y las memorias de autores
desaparecidos. Me sentiré mucho más cerca de ellos de lo que nunca estuve de las personas que
frecuentaba antes. Será tranquila y refrescante, mi amistad con los poetas desaparecidos
porque no tendré que verlos ni responder a sus preguntas. Me hablarán y no
esperarán respuestas. Y sentiré venir el sueño mientras escucho sus voces que
me revelan los misterios. Y me dormiré con su libro entre las manos – y lloverá”
Háblame como la lluvia y déjame escuchar
T.W.